Una camiseta que une la tradición de las franjas verticales con la modernidad de un Barça veloz
El Barça 25/26 va cogiendo forma en todos los sentidos, y ya se conoce cómo lucirán los y las culers de cara a una temporada que se prevé aún más ilusionante que la anterior, que se cerró con dos grandes tripletes domésticos para el primer equipo masculino y femenino. Y ahora, con la nueva primera camiseta presentada al mundo, toca poner la lupa para explicar que se trata de una mezcla perfecta.
Les franjas, la tradición; el difuminado, la modernidad
Al mismo tiempo que se recuperan las tradicionales franjas verticales que han acompañado al Club en la mayoría de los ya más de 125 años, se introduce un difuminado que genera un efecto de velocidad y modernidad, como el FC Barcelona actual. En esta ocasión, la camiseta recupera unas franjas verticales más que típicas, dejando atrás las dos mitades, como ha sido esta temporada y lo fue la primera equipación fundacional que se vistió de 1899 a 1910.
El 16 de enero de 1910 el Barça viste por primera vez con franjas verticales, y no las abandona hasta 1999, en la temporada del centenario, que se recupera la camiseta dividida en dos mitades. Después, en el siglo XXI, y sobre todo en la última década llega la modernidad y los retoques, también en las camisetas. Sin embargo, aparte de alguna apuesta aislada por las franjas horizontales de la 15/16, los cuadros de la 19/20 o la mezcla de franjas y Cruz de Sant Jordi de la 21/22, las franjas verticales han seguido predominando. Como lo harán la próxima temporada, evidenciando la importancia de la tradición en un club como el Barça.
Un Barça moderno, valiente e irreverente
Pero si el FC Barcelona no olvida sus raíces, tampoco escapa a la modernidad y ésta, en la nueva camiseta, está representada por el efecto de difuminado con el que se van entrelazando las distintas franjas que la conforman. Este efecto, que ya estuvo presente en la temporada 2012/13, da la sensación de movimiento, de velocidad y de frescura. Y esto es lo que transmiten también los jugadores y jugadoras del Barça actual. El Barça de la irreverencia de Lamine Yamal o Claudia Pina, de las chispas de Raphinha o Caroline Graham Hansen.
Un Barça dominador, valiente y desacomplejado y que es un espejo en todo el planeta. Un Barça que ahora también tiene una piel que le representa a la perfección.