Ferran se une a la lista de fichajes invernales

Aunque estamos acostumbrados a relacionar los fichajes con el período estival, el mercado de invierno es una buena oportunidad para los clubs para mejorar sus plantillas y, sobre todo, para reforzarse en aquellas posiciones en las que han quedado debilitadas en medio de la temporada. Las lesiones, las sanciones o simplemente aquellos fichajes que no pudieron cerrarse en verano, suelen ser los principales motivos de las inversiones invernales.

Cubriendo bajas

Korneiev, José Mari, Amunike, Bogarde, los hermanos De Boer... Son algunos de los históricos fichajes del Barça en la década de los 90 y todos ellos tienen un denominador común: se convirtieron en azulgranas en el mercado de invierno. Los dos primeros llegaron al equipo azulgrana durante la navidad de la temporada 94-95, pocos días después de rescindir sus contratos con el Espanyol y el Sporting, respectivamente, para reforzar una plantilla castigada por las lesiones.

Amunike llegó el invierno de la temporada 96/97 después de que no pudiera concretarse su fichaje el verano anterior. Bogarde, por su parte, fichó por los azulgranas una temporada más tarde, la 97/98, después de que el club diera de baja al nombrado Amunike por problemas con las lesiones. Los hermanos De Boer aterrizaron en el club en la temporada 98/99 a una plantilla que en ese momento llegó a tener ocho jugadores neerlandeses.

En la década del 2000, nos encontramos con futbolistas como Sorín, Davids, Albertini, Maxi López o José Manuel Pinto. Todos ellos tenían el perfil de futbolista veterano que cubre una posición debilitada por culpa de las lesiones, ya sea en la defensa, en el ataque o en la portería.

Fichajes cada vez más estratégicos

En los últimos años, esta tendencia de fichar a jugadores únicamente para “tapar agujeros” ha ido cambiando. El primero en salir de esta línea fue Afellay, que llegó al club con 24 años en invierno de la temporada 10/11 como futbolista de futuro. Años más tarde, la temporada 17/18, Coutinho y Yerri Mina, de 25 y 23 años, respectivamente, siguieron el mismo camino que el neerlandés. El siguiente invierno se fichó Todibo, de 19 años, y Murillo y Boateng, que pese a no ser futbolistas especialmente jóvenes también reforzaron la plantilla en medio de la temporada.

Cabe mencionar también algunos casos especiales. Arda Turan y Aleix Vidal llegaron al equipo en verano de la temporada 15/16, pero no pudieron debutar con el equipo hasta el enero siguiente a causa de la sanción de la FIFA. Frenkie de Jong fue fichado el 23 de enero de 2019, pero no llegó al equipo hasta el próximo verano. Emerson Royal fue fichado conjuntamente con el Betis el 31 de enero del mismo 2019 y jugó con los verdiblancos hasta el verano del 2021.

El 31 de enero de 2020 se anunció el fichaje de Trincao, que se incorporaría a la disciplina azulgrana el próximo verano. En la misma ventana de fichajes, también se firmó Matheus, que fue cedido al Valladolid hasta final de temporada. Finalmente, el último caso especial a mencionar es el de Braithwaite, que llegó al Barça procedente del Leganés el 20 de febrero del 2020, después de que La Liga autorizara el fichaje debido a la lesión de larga duración de Dembélé.

Ferran, el último en llegar

El jugador valenciano ha sido el último fichaje de una lista que cada vez se hace más grande. El futbolista procedente del Manchester City se suma a Braithwaite, Coutinho y compañía con el objetivo de mejorar las prestaciones en ataque del equipo. El delantero llega al Barça después de una primera parte de la temporada en la que la falta de acierto y las múltiples lesiones han marcado la parcela ofensiva del equipo.