Laporta recoge el aval de los compromisarios para continuar trabajando el proyecto de la Superliga

Laporta recoge el aval de los compromisarios para continuar trabajando el proyecto de la Superliga

El presidente defiende una competición de máximo nivel que garantizaría la sostenibilidad económica del Club y pide confianza a los socios para "seguir defendiendo los intereses del Barça"

En el noveno punto del orden del día de la Asamblea, el presidente Joan Laporta ha informado a los socios compromisarios del proyecto de la Superliga, haciendo un exhaustivo repaso de los antecedentes, de la evolución del proceso y de la situación actual de esta competición que impulsó inicialmente un grupo de 12 clubes europeos y que, actualmente "está viva, pero no está suficientemente madura para dejarlo en sus manos", por lo que no se ha podido someter a la votación de los compromisarios. "No habrá votación porque no hay formato. En cambio, sí que os pido por favor que me permitan seguir defendiendo los intereses del Barça. Este proyecto nos conviene, estoy convencido, y en el momento en que se desencalle llevaremos el formato aquí porque nos lo autoricen".

No habrá votación porque no hay formato pero os pido por favor que me permitan seguir defendiendo los intereses del Barça

Joan Laporta

Los antecedentes

Antes de llegar a esta conclusión, sin embargo, Laporta ha expuesto ante los socios la evolución del proceso de este proyecto que se encontró sobre la mesa cuando llegó a la Presidencia, y del que tuvo conocimiento durante la campaña electoral. El presidente ha reconocido que el tema era urgente, "muchos clubes llevaban mucho tiempo trabajando", y que cuando pudo leer toda la documentación y consultarlo con los abogados pudo confirmar "por primera vez que el proyecto era factible".

Por un lado, las condiciones económicas son muy favorables, porque el proyecto deportivo y económico de la Superliga incluye una inversión de 3.500 millones de euros y "nos garantiza más de 700 millones de euros por temporada más variables". Además de las condiciones económicas, sin embargo, se añadía otro condicionante: "El recuerdo del error histórico que cometimos de no querer aceptar la invitación para disputar la Copa de Europa cuando se creó para que se decidió seguir disputando la Copa de Ferias. En nuestro lugar aceptó la invitación otro club y ganó las cinco primeras ediciones de la Copa de Europa".

Según ha admitido Laporta, el gran error ahora ha sido "no saber explicarlo bien, y es importante, capital, explicar bien este proyecto", que debe contar con la complicidad de los seguidores de todo el mundo, pero el presidente azulgrana está convencido de que "ésta será la competición deportiva más atractiva del mundo, con meritocracia, solidaridad y unas reglas de gestión que impedirán que los clubes-estado alteren la competición". En este sentido, Laporta ha reconocido que la situación de los clubes es "muy delicada" y que las audiencias "han bajado mucho". "En Francia, han bajado a la mitad, justo cuando un club-estado está invirtiendo más que nunca y puede pagar a un jugador el doble del salario. Estas prácticas sí adulteran la competición", ha añadido el presidente.

La situación actual

Después de que los 12 clubes que formaron parte inicialmente de la fundación de la competición anunciaran sus intenciones, se produjeron las reacciones del mundo del fútbol y también del mundo político en contra del proyecto. Estas presiones provocaron que 9 de los 12 "abandonaran provisionalmente" el proyecto "con las responsabilidades económicas que de ello se derivan", una penalización de 350 millones de euros de la que el Barça está exenta, ya que Laporta se reserva la opción de poder salir si los compromisarios no aceptaban participar en esta competición.

La UEFA amenazó a los tres clubes que se mantuvieron firmes (Barça, Real Madrid y Juventus) con expedientes sancionadores, pero "los tres clubes conseguimos que un juez impidiera a la UEFA que nos sancionara para hablar, para discutir". "Este juzgado mercantil de Madrid está diciendo a la Unión Europea que verifique si la UEFA y la FIFA están trabajando en régimen de monopolio en el fútbol. Y a un tribunal suizo se le ha dicho que informe a la UEFA y la FIFA que no nos puede sancionar para debatir sobre la creación de una nueva competición. Y es aquí donde la UEFA ha paralizado su expediente sancionador contra nosotros".

En consecuencia, la UEFA "retrocedió siguiendo la recomendación del tribunal suizo", pero el presidente azulgrana se ha mostrado firme a mantener la posición "para que la legalidad nos ampara". "Quisimos sentarnos a dialogar con la UEFA, pero no quiso. Nuestro sentimiento se debe respetar. No pediremos perdón por pensar y ser dueños de nuestro destino".

Laporta ha asegurado también que el proyecto prevé la meritocracia y la solidaridad. "Queremos ayudar a toda la pirámide del fútbol. La solidaridad de la UEFA prevé el reparto de 180 millones a repartir entre 55 federaciones, y el proyecto de la Superliga, destina 400 millones a la solidaridad".

Intervención del ex presidente Joan Gaspart

En el turno de intervenciones de los compromisarios ha pedido la palabra el ex presidente Joan Gaspart para defender los argumentos de la Junta Directiva y apoyarlos. "El Barça debe liderar el diálogo con la UEFA. Tienes nuestro apoyo para dialogar con la UEFA y defender las ideas que piensas que son mejores por el Club. Todos los clubes menos dos, nosotros y uno que no llamaré, son propiedad de una persona. La UEFA no se puede cerrar el diálogo y si un club puede liderar este diálogo, es el Barça".

Força Barça
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