El análisis de los rivales de la Champions: Slavia de Praga

El FC Barcelona visitará la República Checa el 21 de enero de 2026, en el que será el último partido a domicilio de la fase de liga de la Champions, y el penúltimo de los ocho totales, antes de cerrarla contra el Copenhague. Lo hará para enfrentarse al Slavia de Praga, vigente campeón de la liga local, un equipo con el claro sello de su entrenador, que ya sabe lo que es empatar contra el Barça, y hacerlo en el Spotify Camp Nou.

El rival

Porque el Slavia de Praga es claramente un equipo de autor. Y el nombre de ese no es otro que Jindrich Trpisovsky, su entrenador desde 2018. Hasta su llegada, solo habían ganado cuatro ligas desde 1993, con la disolución de Checoslovaquia, y solo habían participado una vez en la fase final de la Champions (2007/08). Con Trpisovsky han duplicado su palmarés en ligas, ya que ha ganado cuatro, y con la de esta temporada será la segunda vez que jueguen la fase final de la máxima competición europea.

Paralelamente, ha logrado clasificarse para los cuartos de final de la Europa League 2020/21 y también de la Conference League 2021/22. Y todo ello, con un estilo que ha maravillado al fútbol checo y ha sorprendido a Europa. Con una presión altísima, un juego muy dinámico y constante intercambio de posiciones, Trpisovsky se ganó el apodo de “Klopp checo”, además de usar habitualmente gorras durante los partidos, como hacía el exentrenador alemán del Liverpool.

Ahora, ha vuelto a ser campeón de la liga checa tras tres subcampeonatos consecutivos, lo que les ha dado el billete directo para la fase de liga de la Champions. Para el Slavia-Barça falta mucho, ya que hasta el 21 de enero quedan más de cuatro meses y estará abierto el mercado de invierno, pero los checos llevan años siendo un bloque más que reconocible, y no parece que eso se altere hasta que se dispute el partido.

Jugadores a seguir

Lo que sí se verá afectado es la plantilla, sobre todo por la pérdida de uno de sus jugadores más destacados, el griego Christos Zafeiris. El centrocampista helénico es uno de los hombres importantes para Trpisovsky, y este mismo verano ha sido traspasado al PAOK, pero se quedará cedido en el Slavia hasta el 1 de enero. Es decir, ya no estará contra el Barça.

Pero, aun así, tienen nombres destacados y jugadores internacionales en todas las líneas. El portero Jindrich Stanek es un habitual de la selección local, y en defensa el nombre más destacado es el del capitán Jan Boril, de 34 años y en el equipo desde 2016. Boril es el líder vocal de una defensa de tres centrales que suelen completar David Zima, fichado del Torino italiano, y Tomas Holes. También aparece el nigeriano Igoh Ogbu, un hombre importante en la rotación.

En la sala de máquinas también se han reforzado con otro checo que jugaba en el extranjero, como Michal Sadilek, llegado del Twente neerlandés. A su lado, hombres importantes como Doudera, en la banda derecha, o el mencionado Zafeiris, que abandonará el equipo en enero. Y, en ataque, el referente ofensivo es el delantero Tomas Chory, autor de 20 goles la pasada temporada en todas las competiciones.

Precedentes

Esta será la tercera vez que se crucen los caminos del FC Barcelona y el Slavia de Praga, después del doble enfrentamiento en la fase de grupos de la Champions 2019/20. Aquella vez, con solo dos semanas de diferencia, el Barça visitó y ganó en la República Checa (1-2) con un gol de Messi y uno en propia puerta de Olayinka. El gol de los checos fue de Boril, el capitán y todavía referente. Después, fue el Slavia quien visitó el Spotify Camp Nou y logró un empate sin goles.

Estadio

Ahora, este tercer duelo entre checos y catalanes se disputará en el Fortuna Arena, un estadio inaugurado en 2008 para ocupar el lugar del estadio original, de 1953, con capacidad para 21.000 espectadores. Aquella victoria por 1-2 de 2019 ya fue en ese estadio, conocido también como Eden Arena, aunque el Barça ya había jugado allí un partido anteriormente. Fue en 2011 contra el Viktoria Plzen, que disputaba los partidos europeos fuera de su ciudad para tener mayor aforo y mejores prestaciones que en su estadio. Aquella vez, el Barça de Guardiola ganó 0-4 con un hat-trick de Messi y un gol de Fàbregas.

Como curiosidad, será la séptima vez que el Barça visite Praga. La primera fue en 1961, aun formando parte de Checoslovaquia, contra el Spartak Kralove (1-1). En 1981 volvió, contra el Dukla, con derrota por 1-0 en la Recopa, y en 1985 venció al Sparta de Praga en la ida de los dieciseisavos de la Copa de Europa (1-2). En 1992, pocos meses antes de levantar la Copa de Europa en Wembley, el Barça perdió en su visita a la capital checa (1-0), también contra el Sparta en la fase de grupos, y las mencionadas contra el Viktoria Plzen y el propio Slavia, en 2011 y 2019.

Historia

En cuanto al rival, el Slavia de Praga se fundó en 1892 bajo las siglas ACOS, acrónimo en checo de Departamento Académico de Ciclismo Slavia, la disciplina predominante en sus primeros años. Tras una primera época dorada entre 1905 y 1930 con un técnico escocés, John William Madden, emergió una figura histórica como Josef Bican, uno de los máximos goleadores de la historia, que jugó allí entre 1937 y 1948.

Casi medio siglo tardaron en volver a ganar una liga, entre 1947 y 1996. Ya en el siglo XXI, superados graves problemas económicos, se han vuelto a instalar en la élite de su país, y con Trpisovsky son el equipo más laureado, y al que todos quieren vencer.