Álex Yepes: "Me he vuelto a ilusionar"

Llegó sobre la bocina, prácticamente el último día de mercado. La grave lesión de Ferrao, que se unió a la de Sergio Lozano, precipitó la llegada de Álex Yepes procedente de Italia. Lo hace con 34 años, tras una larga trayectoria en el fútbol sala, pero todavía con el brillo en los ojos.

Ahora ya lleva tres semanas entrenando bajo los órdenes de Jesús Velasco, después de la llamada de Jordi Torras. La respuesta fue inmediata: “Sí”. Y lo primero que hizo tras confirmar su fichaje fue llamar a sus hijos. La frase del pequeño, “que ya no iba a perder más contra Ferrao”; la del grande, “que quería conocer a Lewandowski”.

Lo explica con felicidad e ilusión, consciente de la gran oportunidad que se le ha presentado. Jugador con garra y desparpajo, como su sobrenombre de 'Diablo de Cieza' indica, poco a poco va cogiendo ritmo y se va adaptando al equipo. Nos recibe antes de un entrenamiento y nos cuenta qué tal va todo y cómo afronta un curso que, para él, es un premio. 

Ahora que ya llevas unas semanas en Barcelona, ¿cómo va la adaptación?

La verdad que muy contento, muy bien, mejor de lo esperado. Es verdad que conocía a muchos compañeros, incluso amigos, como pueden ser Sergio Lozano o Adolfo, pero había jugado también con Pito. Al final tener amigos en un equipo no es como ir de nuevo sin conocer a nadie. Así que la adaptación va muy bien. Incluso tengo familia en Tarragona, ya que mis padrinos son de allí, y me siento muy arropado.

Tener amigos en el vestuario te ha ayudado. Pero, en general, ¿qué ambiente te has encontrado? 

Pues no me lo esperaba tan amigable. Es una entidad muy grande, que tiene todas las facilidades, y puedes pensar que, tal vez, los jugadores están aquí para hacer su trabajo y ya. Pero todos me han acogido muy bien, se preocupan por mí, me están ayudando muchísimo en la adaptación y hay muy buen ambiente. Incluso los que están fuera del día a día como Ferrao o Sergio me escriben, me hablan, me preguntan cómo estoy, vienen a verme y noto que se preocupan por mí.  Estoy muy, muy contento. 

Y, a nivel de club, ¿qué es lo que más te ha sorprendido?

Como yo ya conocía las instalaciones, porque con ElPozo había venido muchas veces al Palau e incluso había jugado en la Ciutat Esportiva, puedo decir que me ha sorprendido la profesionalidad que hay en un club como el Barça. Nunca la había vivido. Cualquier cosa que necesites, la entidad está ahí. Terminas un entrenamiento con un poco de dolor y tienes a un médico con un ecógrafo a cinco metros. Los fisioterapeutas están ahí para ti para cuando quieras. Hay un control de la nutrición, de la podología e incluso del tema familiar, para encontrar coche o casa, por ejemplo. Todo eso ayuda a estar más tranquilo, a estar más a gusto y por eso el Barça es el club que es. Además, como te he dicho, en un ambiente fantástico y muy acogedor. Sinceramente, no me esperaba que iba a estar tan a gusto como estoy en tan poco tiempo. 

Eres un conocedor fantástico de la liga española, pero has estado un tiempo fuera. Aunque has jugado pocos partidos, ¿has notado algún cambio? 

Totalmente. He notado que es más física que cuando me fui. Quizás la técnica no es tan protagonista y ahora está todo más estudiado y es más táctico. Pero te tienes que adaptar. Después de tres temporadas en Italia, el cambio que he notado al llegar aquí es grande. Ahora mismo llevo tres semanas entrenando triples sesiones todos los días para mejorar físicamente. Poco a poco voy cogiendo ritmo, pero ahora viene una época de muchos partidos. Así que hay que seguir trabajando, porque cuanto mejor esté físicamente más podré aportar y ayudar.

Hablando de tu etapa en Italia, ¿qué aprendiste?

He aprendido a valorar lo que es estar lejos de la familia y lo que es estar lejos de la liga española. En Italia me acogieron genial, como a un hijo, y les estoy muy agradecido por todo lo que han hecho por mí porque han sido parte importante de mi vida. Pero deportivamente no podía desaprovechar la oportunidad de volver de la mano del Barça. Era mi oportunidad, la cogí y vengo con ganas de quedarme aquí muchos años. Y es que cuando me llamó Jordi (Torras), yo sentí que me volvía a ilusionar. Lo he dicho muchas veces y se lo he dicho a él y a Velasco: volví a tener la ilusión de un niño. No me esperaba este regalo. Ojalá no hubiera llegado por lo que ha llegado, que es por la lesión de Ferrao, pero las cosas han sido así y quiero aprovechar la opción que me han dado. 

¿Qué puede aportar Álex Yepes al Barça?

Yo lo que quiero aportar es lo que he aportado durante toda mi carrera, que es dejarme la piel por el equipo en el que estoy. Y esta vez es por el Barça. Evidentemente hay un periodo de adaptación, que en eso estamos, pero voy a intentar ganarlo todo, a luchar por todos los títulos y a intentar sacar mi mejor versión. Esa es la realidad. Todo el que me conoce sabe que soy un jugador con garra, que no tiene miedo escénico y que siempre va a por todas.

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¿Y qué te pide Velasco?

Pues me dijo que quiere que juegue como he jugado siempre. No me pide, entre comillas, filigranas, pero sí que me deje la piel por la camiseta, que defienda, que ataque, que meta goles y haga asistencias, pero especialmente que anime y que le ponga ímpetu al juego.

En un mes toca un desplazamiento marcado en rojo: Murcia. ¿Cómo lo afrontas? 

Sinceramente, lo primero que pensé cuando me llamó el Barça es en el ElPozo Murcia. Cuando salí en el 2020 no quería enfrentarme más a ellos, porque es el club de mi tierra, es mi familia, mis amigos, mi vida… Pero las cosas han ido así y ahora lo afronto con ganas. No por nada en especial, pero simplemente porque he jugado 11 temporadas allí y seguro que va a ser una sensación muy bonita. Evidentemente, aunque a ElPozo le deseo todo lo mejor, voy a ir a ganar, porque yo soy así, porque va con mi personalidad. Y eso los que me conocen lo saben. Pero también tengo ganas de verlos.

A pesar de lo que pasó en tu salida, ¿cómo esperas que te reciba la afición después de tantos años siendo uno de los referentes?

En general, a pesar de todo lo que pasó, y como mi salida no dependió de mí, creo que me recibirán bien. Evidentemente, me gustaría que así sea. Tengo muchos amigos, mucha gente que va a ir a vernos y seguro que el pabellón estará lleno. Ya tengo ganas. Veremos qué pasa. 

Uno de los amigos con los que te encontrarás es con Juanjo Angosto, quién también fue nuestro portero y que encima, como tú, es de Cieza. 

Sí, él sabe la amistad que tenemos. Hace muchos años que nos conocemos y hemos compartido muchas cosas juntos. Para mí, por lo que ha hecho tanto en ElPozo como en el Inter, el Benfica o el Barça, te diría que es uno de los tres mejores porteros de la historia. Ya sea por la relación que tenemos, la amistad que nos une o por lo que lo he sufrido en contra, sinceramente así lo pienso. De hecho, si no hubiera sido por él, hubiéramos ganado muchos más títulos cuando nos enfrentábamos al Barça. Pero todo cuenta: era el mejor, tocó en el mejor equipo y es lo que hay. Ahora, de nuevo en contra pero yo con la camiseta del Barça, voy a intentar ganarle y meterle los goles que no le pude meter (ríe). 

Hablando de títulos, tienes una espinita clavada con la Champions. Bueno, con la Final Four de la Champions… 

Total. Me privaron de jugar la Final Four de Barcelona con ElPozo, que precisamente llegó a la final contra el Barça y perdió 2-1. Jugué la Main Round y la Elite Round 2019/20, pero la final se tuvo que aplazar por la Covid y la fase final se jugó pasado el verano. Y yo ya estaba fuera. Así que sí, me quedé con esa espinita. Me dolió mucho deportivamente, porque me lo había merecido, igual que todos mis compañeros. Pero bueno, todo pasa por algo y ahora vuelvo a tener la oportunidad en un nuevo equipo. 

¿Vamos a por ello, pues, con el Barça?

¡Por supuesto! Soy una persona muy positiva y seguro que el futuro me tiene guardada esa oportunidad. Primero empezamos ya el mes que viene, con la Main Round, pero el objetivo de llegar a la Final Four y poder ganar la Champions está ahí. Vamos a por ello.