Cien años del debut de Josep Samitier y Ricardo Zamora

Cien años del debut de Josep Samitier y Ricardo Zamora

El 31 de mayo de 1919 debutaron con el FC Barcelona dos jugadores que han trascendido en la historia del fútbol estatal

El 31 de mayo de 1919, hoy hace justo cien años, el Barça se enfrentó en un partido amistoso en el campo de la calle Industria a una selección internacional formada por jugadores de los países aliados vencedores de la I Guerra Mundial (franceses, ingleses y belgas). La alineación azulgrana estaba formada por Zamora, Coma, Galicia, Rodríguez, Zabala, Samitier, Costa, Sesúmaga, Gracia, Lakatos y Greenwell. Como era de prever, en aquellos momentos la importancia de ese partido -acabado con victoria local por 2-0- fue más simbólica que deportiva, con las banderas de las naciones vencedoras en la guerra adornando el abarrotado estadio barcelonista.

El tiempo, sin embargo, ha puesto este encuentro en un pedestal mágico. Por un lado, fue el primer partido bajo los palos de la portería azulgrana del mítico Ricardo Zamora, el Divino, un extraordinario portero que al final haría carrera en el Espanyol. Pero muy especialmente nos tenemos que quedar con el segundo debutante de la jornada, un jovencito de 17 años llamado Josep Samitier Vilalta. Aquel medio volante de juego eléctrico marcó el segundo gol del Barça al rematar un córner de manera espléndida. ¿Pero quién era ese chico que apuntaba unas enormes maneras de futbolista?

Pep Samitier (1902-1972) es la gran leyenda histórica del FC Barcelona. Hablar de este símbolo es hacer referencia a una auténtica institución del fútbol mundial de principios del siglo XX. Samitier, máximo representante de la Edad de Oro azulgrana de los años veinte, se ha convertido en una figura carismática del barcelonismo, no sólo por su aprecio por los colores azulgrana y por su categoría como futbolista, sino también por el humanismo que tanto lo caracterizó como persona.

El delantero barcelonés era un jugador avanzado a su tiempo e hizo del Barça un equipo de leyenda; así pues, no es extraño que hiciera pequeño el campo de la calle Industria y provocara la edificación del campo de Les Corts. Sami formó parte de la disciplina del Barça desde la temporada 1919/20 hasta la 1932/33, llevando la camiseta azulgrana 504 veces y marcando 361 goles.

Conocido con el apodo del Hombre Langosta o el Mago por su manera de jugar, Pep Samitier hacía fantasía pura con un balón en los pies. Sami era un auténtico mago con el cuero gracias a una técnica impresionante poco habitual para la época. Destacaba por su rapidez, por sus magníficos saltos y por su habilidad. A pesar de que comenzó como medio volante terminó siendo delantero centro, ya que tenía una gran facilidad para "ver portería". A menudo hacía un juego anárquico, muy marcado por la improvisación e, incluso, desconcertante, pero esto respondía a la concepción del fútbol espectáculo que tenía. Era un futbolista elástico -hecho que aprovechaba para deshacerse de los defensas rivales-, valiente y su espíritu de liderazgo estaba presente dentro y fuera del campo.

Su remate de cabeza era espectacular y su disparo con las dos piernas se caracterizaba por la potencia y la precisión. En definitiva, todos estos rasgos hicieron de él el mejor delantero del mundo de la época. Su palmarés con el FC Barcelona es impresionante: una Liga, cinco Copas de España y doce Campeonatos de Catalunya.

Força Barça
Força Barça

Relacionado Con este contenido

Cerrar artículo

Relacionado Con este contenido