El Galatasaray, el rival en cuartos de final del Barça

El último ganador de la Liga turca será el rival del FC Barcelona en los cuartos de final de la Euroliga. Antes de poder alcanzar la Final Four, los de Xavi Pascual tendrán que superar un rival difícil, pesado y que cuenta con puntos y calidad en sus manos. Entrenados por Ergin Ataman, con mucha experiencia europea, el Galatasaray es la primera piedra en el camino del Barça para ser en Milán el próximo mes de mayo. El ex Nathan Jawai, fichado el pasado verano, sigue de baja por una oclusión vascular.

Arroyo, el timonel

El ex-NBA Carlos Arroyo es el metrónomo del equipo turco. Es el máximo anotador (15 puntos), el máximo asistente (6,8) y también el jugador que más minutos disputa en el Top 16 (34 min). Puede cometer errores, porque arriesga, pero en este Top 16 ha mantenido un nivel de juego muy alto y también ha sido decisivo en los triunfos. Los catalanes tendrán que vigilar de cerca el jugador de Puerto Rico, de 34 años.

Aparte de Arroyo, hay tres jugadores muy importantes en el esquema ofensivo y defensivo de los turcos. En la pista delantera es Zoran Erceg el segundo jugador que más lanza a canasta. Erceg, un 4 abierto que abre muy bien la cancha y que también puede jugarse balones interiores, tiene una media de 11 puntos por partido que se eleva a casi 14 en esta segunda fase de la competición. Parece que el jugador serbio ha llegado a su madurez deportiva a los 27 años.

Malik Hairston, por otra parte, también anota casi 10 puntos por partido, pero es más importante en tareas defensivas y el trabajo sucio. En el exterior, y recuperado tras una larga lesión, también destacan Manuchar Markoishvili y Ender Arslan, que siempre sale desde el banquillo y que es un jugador de rachas.

Poder interior

El juego interior del Galatasaray combina talento, fuerza bruta y física y oficio. Así pues, Milan Macvan, de 25 años y con mucha calidad, trata de hacerse un hueco en el mundo del baloncesto profesional después de haber dominado las categorías inferiores. Ha anotado 8 puntos y ha cogido 4,5 rebotes por partido en una segunda fase en la que ha compartido mucho protagonismo con el ex jugador del CSKA o del Joventut, entre otros, Pops Mensah-Bonsu. Sin tanta calidad en sus manos, Bonsu lo compensa con intimidación, físico y mates. Es rápido de manos y sabe interpretar muy bien los pases de Arroyo.

Así pues, el Barça deberá mantener la concentración los 40 minutos para ganar tres partidos en un rival que llega a los cuartos de final en su mejor momento.