El sueño europeo barcelonista hace parada en Noruega. El Femenino disputa esta tarde la vuelta de los cuartos cuartos de final consecutivos de la Liga de Campeones con la ilusión de estar en las semifinales por segunda vez en su historia (reeditando el éxito de 2017). Por ello, deberá hacer buena la renta de 3-0 obtenida hace una semana en el Miniestadi ante el LSK Kvinner.
Y es que el Barça viene de una semana esplendorosa, que posiblemente le situó en el mejor momento de la temporada. En sólo seis días: victoria solvente en el Wanda en el día del récord mundial de espectadores en un partido de fútbol femenino de clubes (0-2), paso de gigante en la ida de la Champions League (3-0) y goleada al Valencia (3-0).
La dulzura culé se pone a prueba nuevamente ante el campeón noruego. En Lillestrom, aparte de un rival en rodaje y crecimiento, las de Lluís Cortés se encontrarán unas temperaturas gélidas y un terreno de juego -como se comprobó en el entrenamiento oficial- en condiciones muy irregulares.
El técnico azulgrana se llevó a las 19 disponibles en Noruega, con las ausencias de las lesionadas Patri, Van der Gragt y Oshoala y de las convocadas por la selección española sub-19, Candela y Pina. Todas ellas, siguen teniendo un sueño: estar en las semifinales de la máxima competición continental.
