Tal día como hoy, hace cinco años, el FC Barcelona se proclamaba campeón de la Supercopa de Europa por tercera vez. El conjunto azulgrana, campeón de Europa tres meses antes en Roma, se enfrentaba al Shakhtar Donetsk, campeón de la Europa League, en Mónaco. Un gol en la prórroga (min 115) decidió el título.
Había sido un partido con pocas oportunidades. Sobre un césped muy irregular, los hombres de Pep Guardiola dominaron claramente ante un Shakhtar muy conservador. La jugada decisiva nació en una asociación entre Pedro y Messi: el extremo canario batía al portero Pyatov con un disparo raso muy colocado desde la frontal del área.
Había nacido una estrella. Pedro, que ya había dispuesto de minutos en la temporada 2008/09, explotó definitivamente aquel curso 2009/10. Más adelante se convertiría en el primer jugador de la historia en marcar en seis competiciones oficiales diferentes en una campaña.
Aquel año 2009 ha sido el de mayor éxito de la historia del Barça. A la Copa, la Liga y la Champions League del mes de mayo se unieron las Supercopas de España y de Europa en agosto y, finalmente, el primer Mundial de Clubes en diciembre. El Barça de las Seis Copas era una realidad.
