El UNES Barça se hace fuerte en casa y saca la octava victoria de la temporada

El UNES Barça esperaba la llegada del conjunto donostiarra, el Salto Bera Bera, con un pabellón Juan Carlos Navarro deseoso de presenciar la segunda victoria del año como locales, como así fue por un marcador de 65-29.

El conjunto vasco se presentaba a la cita como una de las formaciones que más en forma están en la presente campaña, luchando por las plazas en lo alto de la clasificación desde un buen inicio. Sin embargo, los azulgranas sabían de la importancia de sacar el partido adelante, y además, debiendo recuperar el 'baloncesto-averge' perdido en la jornada de la primera vuelta en tierras vascas.

El técnico azulgrana lo tenía claro, un ritmo alto de partido y una defensa alta y dura harían poder decantar la balanza para el conjunto de Barcelona, y así lo demostraron desde un inicio, intentando imprimir un ritmo frenético y una defensa presionante desde el minuto 1 de partido.

Sin embargo, el conjunto visitante no se arrugaba y empezaba el partido con una altísima efectividad en el tiro exterior, lo que ponía un 0-6 en los primeros minutos de juego. Unos primeros cambios en las filas azulgranas hacían subir un poco el acierto y girar la tortilla en el primer período, finalizado con un 14-10 a favor.

El segundo período comenzaba con el mismo ritmo alto de partido, que para un Barça activo y competitivo, iba muy bien para poder llegar con superioridades. Aunque los visitantes seguían insistentes con su alto porcentaje de acierto desde la media distancia, volviendo a anotar 12 puntos en el segundo período.

Pero enfrente se encontraban un equipo que no bajaba revoluciones y encontraba las situaciones con superioridad y subía su acierto exterior, pudiendo así anotar 21 puntos en el segundo cuarto. Lo que llevaba al descanso con un marcador de 35-22.

A partir de ahí, la segunda parte tuvo muy poca historia. El Barça no se relajó, sino que subió aún más las defensas, teniendo así mayores posibilidades de acciones de transición y anotación fácil. El conjunto vasco, ya fatigado, descendía su acierto y en toda la segunda parte sus jugadores sólo eran capaces de anotar 7 puntos.

Los de Òscar Trigo, sin aflojar, tenían la posibilidad de probar varias formaciones que no bajaban el ritmo en ningún momento y sigan anotando con facilidad encontrando las situaciones con mayor superioridad. Esto hacía que anotaran hasta 30 puntos en los últimos veinte minutos de juego, quedando un marcador final de 65-29.

La solidez del equipo, la capacidad de transicionar y el ritmo ofensivo siguen dando esta mejora al equipo, que la próxima semana visita la pista del líder invicto, el Burgos, sin nada que perder. Seguro que será una nueva oportunidad para seguir creciendo como equipo y jugadores.