Ferran Jutglà, espontaneidad y perseverancia dentro y fuera del campo

Nacido en Sant Julià de Vilatorta el 1 de febrero de 1999, Ferran Jutglà es uno de los protagonistas de esta temporada en el FC Barcelona. Desde su llegada al Club el pasado verano el delantero de Osona no ha hecho más que crecer. Ha pasado de debutar con el Barça B en un amistoso de pretemporada ante L'Escala, a hacerlo y marcar con el primer equipo en el Camp Nou.

Jutglà, consciente de todos los esfuerzos que ha tenido que hacer para llegar a ser jugador de fútbol profesional, toca siempre con los pies en el suelo y, a pesar de estar a menudo en dinámica de primer equipo, sabe que su equipo es el Barça B y así lo demuestra en cada partido. "Soy una persona muy humilde, muy trabajadora y que me ha costado mucho conseguir todo lo que tengo y por mucho que lo haya logrado, o sigues trabajando o lo pierdes, no se ha hecho nada" explica Jutglà en una entrevista en Barça TV.

Ferran, el hermano medio de la familia Jutglà-Blanch, nunca pierde la oportunidad cuando tiene libre de visitar a su pueblo y ver a su familia y a su gente porque “me ayuda a recordar lo que soy y de dónde vengo”. Orgulloso de sus orígenes, Jutglà se emociona al recordar su pueblo, "la plaza, el pabellón, el bar de siempre, los pequeños comercios y cómo la población de un pueblo de no más de 4000 habitantes está orgulloso" de un niño de pueblo que ha hecho realidad su sueño de jugar en el FC Barcelona.

Lejos queda ese trayecto que recorría cada mañana en tren desde Vic hacia Bellvitge en su etapa juvenil para entrenarse y su paso por el Espanyol, el Sant Andreu y el Valencia, pero siempre están bien presentes en su mente: “Mis padres tenían un negocio familiar, dos pastelerías que con la crisis no fueron bien y ellos han sido unos ejemplos para mí para solucionar los problemas con esfuerzo y trabajo y allá donde he ido, he trabajado para llegar a mi objetivo de ser profesional”. "Soy feliz de entrenar en estas instalaciones cada día", reconoce con ilusión el '23' azulgrana. “El día de la Maradona Cup sabía que tenía que aprovechar ese momento, era como la final de la Champions para mí y marcar me dio la oportunidad de jugar después contra el Elche y el Linares en la Copa y poder marcar con el primer equipo fue un sueño inimaginable para mí hace unos años”.

Con esta naturalidad que le representa no es de extrañar, pues, que Jutglà, máximo goleador del Barça B con 9 goles recuerde en cada celebración a su familia haciendo un triángulo con las dos manos: “Representa casa, mi familia, los mis amigos, mi perro, mi gente y saben que va por ellos”.

Su último tanto, el que hizo ante el Alcoyano, sirvió para que el Barça B se llevara una victoria muy importante de El Collao (2-3). "Esto nos servirá para ir hacia arriba e intentar conseguir el objetivo del Play-off", asegura Jutglà. Aquel gol fue su 12º de su cuenta personal esta temporada, pues ha anotado tres con el primer equipo -Elx, Linares y Boca Juniors (Maradona Cup)-. Unas cifras que avalan su olfato goleador y que demuestran que su trabajo y talento no tienen límites en un futbolista que toca siempre con los pies en el suelo.