Un triunfo fabricado desde el banquillo

Nuevo triunfo azulgrana. El FC Barcelona continúa intratable en la Liga y suma ya cuatro victorias consecutivas, con 12 puntos de 12 posibles. Los hombres de Valverde siguen líderes una jornada más, esta vez tras superar al Getafe (1-2) en el Coliseum Alfonso Pérez. Los locales se han adelantado con un gran gol de Gaku, pero los culés han conseguido darle la vuelta al marcador en la segunda mitad con dos goles de dos jugadores que han comenzado el encuentro en el banquillo: Denis Suárez y Paulinho.

La remontada culé ha comenzado desde el banquillo, donde Valverde ha hecho entrar tres jugadores que han acabado siendo decisivos en la victoria. La primera modificación táctica ha sido obligada y ha llegado muy pronto, cuando, a los 28 minutos de juego, Deulofeu ha tenido que sustituir Dembélé, lesionado. El de Riudarenes ha sido uno de los más activos y ha aportado desequilibrio y velocidad por la banda. En la jugada del primer gol culé, ha sido quien ha recuperado el balón que Denis acabaría situando al fondo de la red.

Deulofeu ha aportado un gran desequilibrio, y Denis y Paulinho, el acierto goleador

En la segunda mitad, Valverde ha hecho dos sustituciones más que han acabado siendo claves en el transcurso del partido. Al descanso, Denis Suárez ha sustituido Andrés Iniesta, y el gallego ha sido el encargado de igualar el encuentro a los 62 minutos de juego. El '6' azulgrana ha aprovechado una asistencia de Sergi Roberto para anotar, con un muy buen disparo colocado, el empate en el marcador.

El tercer cambio del técnico culé ha sido Paulinho, y el brasileño ha entrado en el terreno de juego por Rakitic (minuto 77). El centrocampista, cuando sólo llevaba siete minutos sobre el césped, ha anotado un gran gol que ha significado el 1-2 definitivo. Paulinho se ha deshecho del defensa con potencia, y con un tiro cruzado ha superado a Guaita para dar los tres puntos a los culés. En definitiva, tres cambios de Valverde y tres jugadores que han intervenido de manera clara en la consecución de la remontada, dejando claro que las modificaciones tácticas desde el banquillo también pueden ganar partidos.