Llega la era de consolidación de las estrategias globales

La estrategia de los grandes clubes deportivos pasa por consolidar la repercusión global que han tenido en los últimos años. La mayoría de los fans de cada equipo suelen estar en otros países, ya no se trata de un fenómeno exclusivo de cada ciudad. De esta manera, como brands, los equipos han tenido un alcance que otras marcas no podrían ni haber soñado. Este ha sido uno de los cambios de mayor magnitud y relevancia que se ha planteado en el congreso Sports Tomorrow del Barça Innovation Hub. La cuestión ahora es cohesionar a ese aficionado transnacional. Entre las estrategias que se han apuntado en las conferencias, la más citada ha sido la de establecer la figura del aficionado oficial. Un estatus igual, pero para aficionados diferentes.

En la explotación de la propia imagen, también se ha comentado reiteradamente el deseo de los grandes clubes de reducir la influencia de los intermediarios para poder comunicarse directamente con sus propios seguidores. Hay un fenómeno cada vez más evidente en todas las ligas, los clubes compiten entre sí solo en el terreno de juego. Fuera, todos se disputan la misma atención del público. La oferta de entretenimiento nunca ha tenido la magnitud de la que goza actualmente, por eso cada especialidad deportiva, como una sola compañía, compite contra los videojuegos, las plataformas de televisión, las redes sociales y todo tipo de industrias del sector. En algunos casos, como ha revelado un representante del Bayern Munich, su club comparte conocimiento y tecnología con otros clubes, porque, en este contexto, en solitario correrían el riesgo de quedarse estancados. 

No obstante, en esta competencia, el gran reto lo suponen las nuevas generaciones. Los eSports empiezan a ser la vía imprescindible para llegar al público más joven desde otros sectores. De hecho, como se ha puesto de manifiesto en estas conferencias, los juegos electrónicos también empiezan a ser una apuesta educativa de primer orden. En los primeros proyectos de ligas llevados a cabo en Estados Unidos se ha comprobado que sirven para integrar a los alumnos y motivar y hacer más participativos a los que son más reservados e introvertidos. La aspiración que siempre ha tenido el deporte tradicional. 

Además, también es fundamental la apuesta por las nuevas narrativas sociales. El Angel City de Los Angeles es un club de fútbol femenino recién fundado y en sus estatutos recoge la dedicación de un porcentaje anual de sus beneficios al desarrollo de la comunidad. Un giro que también se está produciendo en el sector de los sponsors. Los anunciantes buscan que su nombre aparezca no solo al lado de un club importante que logra éxitos, sino en una organización capaz de contar buenas historias. 

De hecho, la faceta publicitaria tradicional empieza a estar muy cuestionada. No por el negocio, sino por las nuevas generaciones, que la rechazan. Esta situación está llevando a las empresas a buscar acuerdos de otro tipo que los lleve a colaborar con los mismos fines o objetivos concretos. En el campo de la innovación es el sistema establecido. Los acuerdos son imprescindibles para el desarrollo de tecnología de la salud en el deporte, de donde surgen avances en Sanidad para toda la población, y también para experimentos informáticos que pueden hacer evolucionar el comercio y las empresas de todo un continente, como es el caso de la colaboración del FC Barcelona con el Centro de Supercomputación de la ciudad y su proyecto de estadios y grandes superficies inteligentes basados en gemelos digitales. 

En los medios, las retransmisiones deportivas van dando entrada a las reproducciones en 3D, como el GVR que ya funciona en México, y se ha pronosticado que el desarrollo de la experiencia en segunda pantalla se va a potenciar en gran medida en los próximos años. Aunque la novedad más importante presentada han sido los proyectos de democratización tanto de las retransmisiones como del análisis de datos a partir de vídeos. Mediante Inteligencia Artificial, hay planes en marcha para ofertar sistemas de grabación de partidos de cualquier nivel sobre cuyos vídeos ya se podrá realizar análisis de datos. Facilitar las herramientas de la elite no solo a las divisiones inferiores, también a los deportistas amateur. A cualquier aficionado. 

Por su parte, el análisis de datos avanza hacia fórmulas que se adentran ya en la valoración del juego y la categorización interpretativa de las jugadas. Herramientas para entrenadores, pero sobre todo un antes y un después para el scouting. Una profesión que, gracias a estos avances y la mencionada democratización de los datos, podrá empezar a trabajar con categorías no profesionales y, lo más importante, con países que hasta ahora no tenían acceso a tecnologías avanzadas. 

En el terreno meramente deportivo, los entrenadores que han pasado por el congreso han reconocido que se puede hablar de un antes y un después de Guardiola y la selección española de fútbol. Modelos que fueron imitados por una razón palmaria: eran triunfadores. Se trató de imitar el éxito. En este nuevo contexto, se ha definido la figura de un nuevo tipo de jugador que no se conforma con obedecer e integrarse en un sistema, sino que exige saber los porqués de las decisiones que se toman. Empieza a hablarse de los entrenadores también como formadores. 

Al mismo tiempo, Arsène Wenger, ha pronosticado la aparición de un entrenador que tendrá funciones como las del director de una empresa, por todo el equipo de médicos, informáticos y analistas que tendrá a su cargo, pero que seguirá siendo contratado por los clubes como un empleado más. Un futuro en el que la realidad virtual cambiará por completo los entrenamientos, especialmente los análisis de los partidos que se han jugado, y también un mañana en el que los deportes aumentarán exponencialmente su competitividad con la formación, tanto teórica como la que facilita la tecnología, que cada vez está más al alcance de los jóvenes que empiezan en las categorías inferiores.