La gesta de Josep Cubells que salvó el patrimonio histórico del Barça
La historia del Barça está llena de momentos épicos, y también de heroicidades como la que protagonizó Josep Cubells Bargalló, quien fue conserje de las diferentes sedes del Club, desde 1927 hasta su muerte, en 1960. Hoy, hace 82 años, Cubells arriesgó su vida para salvar el patrimonio barcelonista en un momento extremadamente delicado.
Sucedió la noche del 16 de marzo de 1938, en plena Guerra Civil española. A las 23.30 horas Cubells estaba solo en la sede social del Club, ubicada en el número 331 de la calle Consell de Cent de Barcelona, donde además tenía su vivienda, cuando cayó una bomba lanzada por la aviación italiana que apoyaba al bando franquista que destruyó prácticamente todo el local y convirtió en chatarra alrededor de 300 trofeos conseguidos durante los primeros años de vida del Club.
Él estaba en la parte de atrás y salió ileso, pero la parte delantera cayó de arriba a abajo y murieron cinco vecinos. A pesar de la confusión y el pánico general, Cubells no perdió la calma y dedicó todas sus energías a evitar que el patrimonio del Club que se había salvado no desapareciera en manos de algunos grupos incontrolados.
Con la ayuda de otros empleados y algunos amigos desafió el peligro y se organizó rápidamente para depositar el material recuperable, como trofeos (enteros o dañados), documentación y mobiliario en un almacén seguro antes de trasladarlo al nuevo local de la Ronda de San Pedro. También recuperó para el Club 2.500 pesetas que habían quedado entre los escombros. Su rápida y decisiva actuación sirvió para salvaguardar la memoria histórica de los primeros 40 años de vida del Club.