"Lucho como me enseñaron cuando jugaba"

El periodista Pere Escobar entrevista a Anty García, exjugador del FC Barcelona afectado de ELA

La historia de Anty García no es muy diferente a la de tantos otros jugadores que han pasado por la cantera del Barça. Los compañeros con los que jugó daban a entender que podía llegar más lejos. Aunque el fútbol tiene estas cosas y hay muchos que se quedan por el camino. Lo que hace diferente a Anty es su lucha descomunal contra la adversidad. Lo que le convierte en un héroe es su rotunda negativa a tirar la toalla.

Hace unos días presentó su segundo documental, “La inspiración del 8”, que habla del “valor del amor, la amistad y el trabajo en equipo”. Tiene mucho trabajo, la cabeza llena de proyectos y la obligación de preparar los entrenamientos de su equipo benjamín de la escuela BRAFA. Anty García tiene ocupadas todas las horas del día. De un día a día, eso sí, muy complicado. “Sí, la verdad es que es muy complicado. Y a la vez pura rutina. Pero necesito mucho apoyo para poder estar tranquilo, en casa, con mi mujer. Por las mañanas viene una persona a echarme una mano”.

Anty García fue uno de los jugadores de aquel juvenil que, entrenado por Carles Rexach, ganó la Copa del Rey y dónde había jugadores de la talla de Sergi, Amor, Roura, Ramon o Vilanova. Llegó a entrenar con el primer equipo y tenía una proyección espléndida. Pero el fútbol le tenia preparado un futuro más modesto que acabó modelando hasta encontrar lo que ha terminado siendo su pasión, enseñar a los niños.

El gran batacazo, pero, llegó más tarde, el cuatro de agosto de 2014 cuando le diagnosticaron ELA (Esclerosis lateral amiotrofia) una enfermedad degenerativa e irreversible. “Me la diagnosticaron aquel día, pero, según mi neurólogo, había empezado mucho antes. Ahora estoy bien, a pesar de la gravedad de mi situación”.

Una gravedad que lo tiene recluido a una silla de ruedas, dependiendo de la ayuda externa, aunque con la cabeza muy clara y llena de trabajos y proyectos. “Ahora mismo estoy muy activo. Hago de entrenador y planifico los entrenamientos de mi equipo benjamín de la escuela Brafa”.

El fútbol, que lo echó de la élite con una exigencia que no asumió, es ahora su faro.

“Cuando lo dejé me dediqué a ayudar a los niños que perseguían sus sueños. Hoy es la primera motivación para mantener el cerebro bien activo. La cabeza me funciona perfectamente y eso es la única cosa que me hace olvidar la situación en la que estoy”.

Su hermano David también le echa una mano. En los entrenos, en los partidos. Haciendo llegar sus instrucciones a los niños y haciendo los cambios que Anty considera oportunos. Pero, y los niños, ¿cómo han vivido tu proceso?

Bien, los niños normalizan la situación mucho más rápido de lo que nos pensamos. Al principio les llamaba la atención mi figura en la silla de ruedas y mi forma de comunicarme con ellos, pero ahora todo es mucho más sencillo y normal. Incluso ya me entienden muchas veces.

¿Qué les enseñas? ¿Qué les trasladas?

“Hombre, como entrenador doy mucha importancia a fomentar la unión entre compañeros, al trabajo en equipo, al respeto, a la buena educación dentro y fuera del campo y a darles a entender que el fútbol y el deporte les ayudará a la vida en general. Mi lucha ahora está fundamentada en lo que aprendí como jugador. Lucho como me enseñaron cuando jugaba. Ser un ejemplo, no rendirme ante los problemas.”

¿Eres consciente de que te has convertido en un ejemplo? ¿de que tu lucha te convierte en un héroe a ojos de los otros?

“Desde que estoy así, en la silla de ruedas, me he ido haciendo a la idea de lo que puede suponer para la gente que me rodea. Pero no hago nada en especial. Hago lo que me han enseñado toda la vida.”

¿Y la gente que te ayuda? La mujer, el hermano, la familia, los amigos… para ellos también tiene que ser duro.

“Mi entorno ya ve la situación muy normal. Es la que es y ya actúan con normalidad. Para mí es lo mejor que podemos hacer todos. Es la mejor manera posible de normalizar una situación tan excepcional.”

A pesar de las dificultades, el trabajo, los inconvenientes… Anty no ha dejado de mantenerse en contacto con sus compañeros de fútbol. La Fundación Barça Veteranos – creada hace 25 años por la Agrupación- también vela por él. Es fácil verlo en alguna fotografía con miembros de la Agrupación que le dan apoyo en sus proyectos. El último, Ramon Calderé, en la presentación de “La inspiración del 8”.

“La Agruapción me está ayudando con algunos gastos que tengo. Y sobre todo con el calor y el apoyo humano, que es lo más importante en mi situación. Actualmente mantengo contacto con muchos de mis excompañeros como Amor, Roura, Hidalgo, Botella, Sergio Pérez… y de la Agrupación con Rexach y Alfonseda. Todos dispuestos a ayudarme en lo que pueda necesitar. No te puedes ni imaginar como es de importante para mí.”

Força Barça
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