Éxito de la experiencia VIP en el Clásico

En el Clásico se pudo vivir un auténtico espectáculo, pero no sólo en el césped del Camp Nou, con el hat-trick de Suárez y los goles de Coutinho y Luis Suárez. Fuera del terreno de juego, los clientes VIP pudieron pasar unas horas previas inolvidables que fueron todo un éxito. Muchos espacios de las instalaciones azulgranas se transformaron para permitir a todos los clientes que escogieron este servicio disfrutar de un ambiente mágico.

La demanda VIP fue tal que se abrieron tres salas VIP extra para atenderla. La Pista de Hielo, el Museo y el Auditorio se transformaron totalmente para acoger las 1.700 entradas vinculadas a estos tres espacios. Asimismo, 180 personas adicionales se encargaron de atender las necesidades de los clientes para que la previa del Clásico estuviera a la altura de lo que terminó siendo una noche histórica para el FC Barcelona.

La Pista de Hielo, transformada

La Pista de Hielo se transformó completamente, y se convirtió en un espacio donde los clientes se pudieron sentir como un jugador y vivieron la experiencia de formar parte de la plantilla de Ernesto Valverde. En el centro del campo se montó una gran barra central en torno a la que se diseñó todo el espacio.

Otros elementos que destacan de la experiencia que pudieron vivir los clientes VIP son las líneas del terreno de juego, dibujadas sobre una moqueta verde, así como un 'photocall' con una réplica exacta del vestuario, dos 'photocall' de las banquetas y otro de la zona mixta. La diversión durante el Clásico la puso un futbolín gigante y un pilar de KONAMI donde los clientes VIP podían hacer más amena la espera jugando a la PlayStation.

El punto álgido en la Pista de Hielo llegó cuando la canción 'Viva la Vida', de Coldplay, comenzó a sonar a las 15.40 horas, la hora en que el confeti estalló para completar una previa única. El Museo y el Auditorio siguieron el mismo hilo conductor, e hicieron disfrutar a todos los presentes durante los instantes previos a un partido que recordarán siempre.

La dinamización de las salas, a cargo de actores infiltrados vestidos de árbitros, entrenadores y reporteros, hizo que los clientes se sintieran aún más dentro del terreno de juego, mientras una pantalla gigante indicaba el tiempo que faltaba para el inicio del enfrentamiento. La experiencia la completaron los hermanos Iglesias, con un catering de renombre para redondear el 5 a 1 ante el Madrid en la que fue una jornada única para todos los presentes.